David Bustos

LUCRO


La verdad de las cosas que las cifras hablan por sí solas.
No lo digo yo, lo dicen las cifras.
Porque lo que importa son las cifras.
Cifras más, cifras menos. La cifra indica
y concluye. Podemos hablar toda la noche
pero si no hay cifras, no podemos entendernos.

Me detendría en las cifras. La inquietud la entiendo.
Comprendo la inquietud. Destaco el ímpetu.
Incluso se agradece la preocupación.
Pero las cifras arrojan otra realidad.
La realidad de las cifras son desoladoras.
La realidad de las cifras son alarmantes.

Es hora de que se hable de las cifras.
Si las cifras dicen.
Si las cifras muestran.
Si las cifras señalan el camino.
No tenemos alternativa.

Están ahí. Son lo que son.
No se trata de que me guste o no me guste.
No se trata de echar todo abajo.
No se trata de que no queramos.

Aplaudo la preocupación.
Destaco las demandas.

Pero no nos enredemos, las cifras
revelan una verdad
extraen una situación.
Para eso están las cifras
no están para otra cosa.

Tanto Ud como como yo sabemos lo que dicen.

Haga Ud el intento de olvidar las cifras.
Haga Ud el intento de ignorar
de no tener las cifras a mano.
Haga Ud el intento de desconocerlas
de no aplicarlas.
Piense fuera de la cifra.
Desarrolle su objetivo con las cifras de lejos.
NO SE PUEDE.
Entonces entienda la cifra como cifra.
No como caja de bombones
No como billetera atestada de tarjetas.

Interrogue a la cifra de frente
Comuníquese.
Sincérese con la cifra.
No las saque fuera de contexto.

Las cifras son amenas y elocuentes.
Las cifras son frías y duras.

Las cifras como testimonio.
Las cifras no dan para tanto.
Las cifras suben y bajan.
Las cifras están en constante proceso.
A veces las cifras se desentienden.

No escuchan.

Bien sordas pueden ser las cifras.
Las cifras no se manipulan.
Las cifras son instrumentalizadas.
Las cifras obedecen a un diseño.

Las cifras escogidas
¿Cuáles son las cifras escogidas?
¿Qué animan a las cifras escogidas?

Se estudian las cifras.
Salen a la calle.
Se acumulan y gritan las cifras.
Reunidas todas podemos decir que hay fuerza en las cifras.

La historia de las cifras es conocida.
Exigen su derecho.
Reclaman su necesidad.
Las cifras muestran conciencia.
Las cifras despiertas sacuden a otras.
Pierden el miedo.
Las cifras en blanco, las cifras en negro.
Las cifras altas y bajas, se niegan a participar
en su calidad de cifras.

Se instala el deseo de no ser cifras.
Una a una se van borrando.
Desaparecen.
La forma de medir y calcular la cifra
también desaparece.
NO QUEDAN MÁS CIFRAS.
El lucro ha dejado de existir.
LA EDUCACIÓN ES NUESTRA.